He aquí mi secreto - dijo el zorro - Es muy simple; no se ve bien sino con el corazón.
Lo esencial es invisible a los ojos.
Bueno, queda claro que convivimos con diversos tiempos históricos en un mismo momento, porque será muy pintoresco, pero funcional... no me gustaría tener que esperar en el desierto de Almería a un bus con retraso un mediodía de Agosto<